El dirigente ribereño comentó que existen diferencias en ambas orillas, ya que Uruguay tiene desde el primer momento un decreto de servidumbre «que a ellos los ha complacido», algo que no fue posible lograr de este lado del lago. También los uruguayos tienen, desde hace 25 años, una comisión de ribereños que tiene carácter oficial, ya que cuenta con un decreto presidencial que la avala, lo que tampoco sucede aquí.
«Allá también tienen dificultades pero la diferencia es que ellos han cobrado, lo que aquí aún se espera que suceda, a pesar que prometieron que a fines del año 2003 todas las deudas por inundaciones y erosión estarían saldadas», dijo Zamora.
«Queremos formar un núcleo binacional de ribereños para hacer alguna presentación al presidente de la CTM», dijo el dirigente.