Desde el mismo momento en que García resultara triunfador en las elecciones internas, comenzaron algunos problemas. En aquél momento algunos lo acusaban de dejar de lado a militantes «históricos».
Luego del triunfo en las elecciones generales, las críticas no se acallaron, cuando el flamante intendente optó por elegir para cubrir los cargos del Ejecutivo a personas que no pertenecían al partido.
García niega que las críticas sean generales y, por el contrario, afirma «a la hora de recorrer la ciudad y charlar con la gente, no siento que los justicialistas estén disconformes. No digo que todos me aplauden, pero en general creo que el justicialismo está viendo con buenos ojos este gobierno».
Afirmó que «el Partido Justicialista debe demostrar que a las elecciones no las ganó García con un grupo de gente, sino que el triunfo fue del partido».
Dijo también que «en lo político hay mucho para trabajar», considerando necesario «generar nuevos cuadros y abandonar viejas artimañas que fueron las que alejaron a la comunidad de los partidos políticos».
En tanto el intendente expresó que «las comisiones vecinales para este gobierno es algo estratégico para el crecimiento, porque nos permite aunar esfuerzos»..
«Yo no se ni pregunto a qué partido político pertenecen los miembros de las comisiones vecinales -enfatizó- sólo escucho ideas, proyectos y trabajamos junto a ellos».
«No me apoyo políticamente en las comisiones vecinales y, por el contrario, mi gobierno se ha abierto a ellas», finalizó Juan Javier García.
