El remate fue pedido por el antiguo dueño del Banco Pelay, apellidado Minetto, debido a que el municipio de Concepción del Uruguay le expropió el lugar en 1973 sin haberle pagado una suma equivalente al valor que tienen esas playas hasta el momento. Minetto accionó judicialmente y hoy tiene en vilo a las autoridades uruguayenses debido a la posibilidad de rematarle algunos inmuebles municipales.
La misma aún se encuentra en trámite en el Juzgado de Primera Instancia en lo Civil y Comercial Nº 1 de la ciudad ya que no tiene sentencia firme.
Los Bloques, en su mayoría, coincidieron en la necesidad de consensuar con la propuesta.
En la sesión también se mencionó casi en forma unánime el descontento con los abogados que se han desempeñado en el Municipio. En ese sentido la concejal Morabes expresó ” en su ejercicio no han servido para más que cobrar altísimos honorarios y que se les debe empezar a aplicar sumarios administrativos y al que no le gusta que se vaya a currar a otro lado”. En cuanto a los remates específicamente destacó que “hay mucho revoloteo de malos vecinos que están esperando que estas tierras, cuando pase la autopista Mesopotámica, aumenten su valor”.
Fuente: La Calle On Line.